domingo, 13 de septiembre de 2015

Humillación

No siempre el que humilla tiene más armas que el humillado. A veces el humillado se achica y no emplea la violencia en defensa propia. Entonces la violencia se vuelve contra él. Cuando Freud presenció cierta humillaciones sufridas por su padre (y luego por él mismo), sintió rencor hacia el grupo de humilladores pero también la vergüenza de haberse avergonzado de su padre. 

La humillación se produce por la violación de los límites personales de una víctima, por causa de la agresión moral y física cometida por la otra persona.

SOBRE CÓMO QUERER A LAS PERSONAS

Por Julio Cortázar "Querer a las personas como se quiere a un gato, con su carácter y su independencia, sin intentar domarlo, sin inten...